Deana Gamboa embajadora del arte y la cultura

Línea directa

Por Avenabet Mercado

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Deana Gamboa, artista de México, lleva el humanismo en la sangre; es  una dama humilde en sus acciones y de sentimiento noble, dedicada a las actividades culturales a tiempo completo y cuando no está pintando pasa las horas  escribiendo poemas. Los viajes, una de su satisfacción.

Sus obras son muestras de  una dedicación permanente  en busca de la perfección profesional, es así como ha podido desarrollar su propia técnica  para plasmar en cada entrega de sus pinturas  un colorido distinto y una forma especial de expresión visual;  su dominio con el pincel, sus trazos precisos utilizando el óleo y en otras ocasiones la acuarela, deja tanto que decir en el estilo de Gamboa.

Como sea posible en ella, la pintura es su lucha. Es una artista de pocas conversaciones, pero sabemos de las  palabras directa al expresarse. Sus pinturas nos traen formas refrescantes en el mundo de las artes y es por esos que siempre da  importancia a sus viajes por los Estados Unidos o en  regiones su propio país, México, donde los paisajes naturales son entornos precisos como para transmitir el mensaje. Sus cuadros al detenernos mirar nos  producen sensaciones de libertad.

Las obras responden a un mundo posmoderno, pero jamás sin dejar atrás su lucha por la educación. La cultura es también identidad, es ahí donde centra su lucha, especialmente en los efectos que transmite al elaborar detalles simbolizando el sentido de ser mexicano, amar la tierra , abrazar al agricultor, usar los utensilios o herramientas donde el hombre deja sus huellas. Así es el mundo de la pintora y poetisa Deana Gamboa.

Arte y pensamiento

Gamboa no solamente trabaja en su pintura, sino que además mantiene una tradición por rescatar aspecto de la cultura regional de su país

Es cambio constante la cultura,  y en ella el arte no se detiene. La pintura de Gamboa, dicen algunos de sus críticos, traslada emociones porque se trata de una pintura poética y, casi siempre, de la mano a una semiótica intertextual convergente con la metáfora de su personal discurso plástico.

En unas ocasiones es el acrílico, pero en otras  sus obras nos traen sellos muy personales en las raíces de su infancia como se muestran en los detalles de  bodegón, paisaje, retrato, entre otros aspectos del arte donde impone su proceso artístico con sentido.

Sus países, en sí, nos muestran tanto detalles de los campos de una nación tan grande y noble en valores tradicionales como es México. Hasta la sombra que producen los árboles  es un detalle bien importante al tocar el suelo, se observa el juego de los rayos del sol y la luz, una luz única dejando un detalle de información por mas simple que sea el toque con el suelo. Hablar de Deana Gamboa