martes, 20 de mayo de 2025

Presidente Nayib Bukele y los nuevos liderazgos en América

Por Avenabet Mercado Mientras algunos gobiernos de América Latina se sumergen en discursos ideológicos caducos, el presidente Nayib Bukele ha demostrado que un liderazgo fuerte no necesita de populismo ni de autoritarismo para transformar una nación. La diferencia entre su gestión y la de líderes como Daniel Ortega, Nicolás Maduro o Gustavo Petro es abismal: Bukele gobierna con resultados, y no con discursos que dividen o manipulan. El régimen de Ortega en Nicaragua es un triste reflejo del pasado: persigue a los cristianos, silencia a la prensa y criminaliza la oposición. En contraste, Bukele construye cárceles para criminales, no para periodistas. Limpió las calles de pandillas y fortaleció la seguridad ciudadana, ganándose el respeto incluso de quienes lo criticaban al inicio. Panamá, por su parte, enfrenta una crisis de liderazgo. Nuestro país carece de una visión clara y de asesores estratégicos capaces de negociar con firmeza en el escenario global. Es necesario aprender del pragmatismo de Bukele y de su habilidad para sentarse con figuras clave como el Secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, quien ha reconocido públicamente la cooperación histórica de El  Salvador en temas migratorios y de seguridad hemisférica. Rubio es hoy una figura clave de la diplomacia internacional. Su respaldo a líderes democráticos y su posición firme frente a las dictaduras de China, Rusia o Cuba lo convierten en un aliado natural de los pueblos que luchan por la libertad. En Centroamérica, su apoyo ha sido vital para que los esfuerzos de seguridad de El Salvador sean vistos como una política de Estado y no una excepción regional. Bukele es la prueba de que América Latina puede tener líderes firmes, negociadores hábiles y profundamente democráticos. Su ejemplo, sin duda, incomoda a quienes están atornillados al poder sin el respaldo del pueblo. Pero para quienes creemos en la justicia social que nace de la democracia, es una inspiración real. La visión de Bukele es siempre clara al firmar acuerdo, a diferencia de otros líderes de América donde se pisotea el sentir de la libre empresa, tendrá  energía las 24 horas del día a precios competitivos sin depender de la geopolítica ni de los precios del petróleo, eso significa un compromiso con la prosperidad de su nación. América necesita de lidéres que sean estadistas, como  hoy se tiene al  Presidente Luis Abinader en República Dominicana, lidiando con la  crisis migratoria de las naciones de Venezuela, Cuba y Haití. Es  Igual a Nayid Bukele enfrentando a las pandillas de  Mara Salvatrucha y MS-13 , también ambos jefes de Estado merecen  aplausos en sus jornadas por la democracia, sistema de justicia y libertad. (avenabet@gmail.com)

lunes, 18 de noviembre de 2024

Caricaturas y humor de Benjamín Samudio (Benji)

Por Avenabet Mercado Se hace imposible no pensar en las huellas que dejan las caricaturas del artista Benjamín Samudio (Benji, como lo conocen en el ámbito nacional e internacional). Él, al tocar su lápiz para hacer trazos sobre el papel, siempre establece un punto visual directo en interés de ir dando forma a lo que será su mensaje final. Cuando se habla de Benji, personaje sencillo y humano, es como reflexionar en el estilo de un caricaturista que explora la rica intersección entre arte, humor y crítica social. No es exageración, él tiene talento porque sabe elegir cuidadosamente qué destacar; crea un equilibrio entre risa y reflexión. En todo el sentido de la palabra, es él un artista al momento de sintetizar características distintivas de la sociedad panameña; pero también en otros ámbitos internacional, cuando describe con sus figuras las crisis políticas de la democracia en Venezuela o también los escenarios del Medio Oriente, donde en sus críticas no se detiene en bandos políticos sino en características distintivas de personas o situaciones aberrantes, donde los efectos de la guerra golpea directamente a la familia y también a miles de niños. Benji es un periodista de la comunicación social, sin hacer ruido ejerce pleno dominio del mensaje. Este caricaturista panameño ha ganado su espacio, posee premios y certificaciones en Irán, Rumania, entre otras naciones del Medio Oriente, Asia, Europa y América. En ocasiones las caricaturas de Benji mantienen un estilo sorprendente, en su camino ha demostrado que no teme a los gobiernos cuando se trata de llevar la información con la verdad; pero otras veces, encierra un humanismo eficaz y con mensajes visuales juguetones, sorprendente y realista. Más que nada los temas políticos en el dibujo satírico, en el que deforma las facciones y el aspecto de alguien, son bien interesantes. Benji es cruel al pincelar el aspecto de alguien ligado a la corrupción, pero también humaniza sus personajes cuando mantienen buenas relaciones de civismo en el entorno social; él muestra pleno dominio en la forma de llevar el mensaje y no se aparta de ningún ángulo al usar la exageración y la ironía para transmitir mensajes profundos, es interesante observar cómo describe los personajes del Ministerio de Educación y sus caminos en busca de una reforma educativa que, pareciera, jamás nos llega. En cada golpe político, frente a los anillos de las denuncias en el tornado de la corrupción, él reinterpreta la realidad social y puede darle valor con un agudo sentido del humor. Cada uno de los golpes políticos de Benji, nos teje un puente entre el arte y la sociedad. Sus figuras son un mundo donde la información abunda o se vuelve crucial para fomentar el pensamiento crítico y la discusión a través de la risa; pero todo eso es posible por sus habilidades técnicas excepcionales, también porque él demuestra tener profundo sentido por la cultura y las verdaderas raíces tradicionales de Panamá. En nuestra nación este artista ya marca sus puntos porque figura entre los maestros de la ridiculización, deformación, exageración, burla y la bufonada al hacer sátira en cada una de sus caricaturas. Y en verdad, no es nuestro interés hacer comparaciones; es Benji un personaje que con sus trabajos artísticos influye en la opinión pública, sirve de catalizador para el cambio político y social, además, ofrece consuelo a quienes se sienten desvalidos. No tolera el abuso porque entre sus manos tiene una gran espada, el lápiz.
No cabe duda, Benjamín Zamudio es un buen comunicador social al instante de facilitar el mensaje; es un dibujante talentoso, un observador agudo de la realidad, utiliza su arte para desafiar, cuestionar y entretener. Posee gran capacidad para capturar la esencia de un momento, situación o personaje, combinada con un enfoque crítico, convierte su caricatura en un medio efectivo para plantear preguntas y reflexiones que, de otro modo, podrían pasarse por alto. Tiene él un estilo de sonreír, pero también de criticar. Nos lleva a la Asamblea Nacional, donde existen diputados que desean ejercer dominio en las leyes pero que también hay otros que como payasos son los personajes de un circo político pisoteando la democracia, que en sí es el sistema más transparente de la libertad y la justicia social. En los grandes eventos sociales escucho su nombre y también ecos entre los políticos: “Fíjate quien acaba de llegar”, dice un diputado como estrujando sus dientes con un estilo burlesco y lleno de mediocridad. - “¡…Ay, no joda! …, pero si es Benji ! ” , dice otros de los personajes saboreando un vino. Muchos critican a Benji, pero también desean tenerlo cerca por el poder de su pluma frente a la espada. Su humor es un poco agrio, ácido y seco frente al enfrentar la intolerancia y los extremismos políticos.
No importa la forma, estilo o críticas que se hagan de él; sus pasos por la arena política es de premios al ejercer un buen periodismo informativo. Es un defensor del humanismo, pero también un caricaturista cruel, agudo y demoledor. Es capaz de convertir en monstruos desfigurados a los políticos y funcionarios corruptos de Panamá. De esa manera es Benji, como gusta que lo llamen en un mundo de imágenes, de hipocresía y donde las palabras pueden perderse en el ruido; es él un artista donde su rostro grabado ya es parte en la memoria colectiva de la sociedad panameña porque sus caricaturas nos invita a reír, pensar y, sobre todo, a actuar pensando siempre en el porvenir de la nació. ( Por AvenabetMercado).

sábado, 1 de junio de 2024

Presidente electo Raúl Mulino, entre el ritual político y la honestidad



El presidente de Panamá, Laurentino Cortizo, recibe al presidente electo, José Raúl Mulino, para coordinar el proceso de transición de poder que empezará en los próximos días tras los comicios generales. (Foto cortesía sistema Web/Presidencia)

Por Avenabet Mercado / Al Día Panamá

 @Avenabet Mercado

La fibra moral nos llega desde niño, con un ritual  por la influencia de la familia;  también se desarrolla la fibra moral mediante los procesos de la educación, en un espacio donde el ritual de la honestidad figura  presente. No existe duda, apoyado en los principios éticos el presidente electo José Raúl Mulino avanza hacia el folio presidencial no con palabras ni promesas huecas, sino con hechos.

En las campañas políticas, que cierra con el triunfo electoral, Mulino mantuvo un comportamiento ético sin ataques personales hacia sus adversarios políticos. El pueblo observó  él habló con el corazón al insistir que en su gobierno no habrá botella.  Además indicó que buscará resolver la crisis de los migrantes en la frontera Panamá-Colombia, donde muchos son utilizados, cada vez más, como moneda de cambio o quizás algo peor, igual a peones en un tablero de ajedrez y  donde los primeros protagonistas son los carteles de las drogas o los mercaderes de trata de blanca.

Mulino, a quienes muchos de sus adversarios los mencionaban con apodos que hoy ni vale la pena destacar, ante esos ataques mantuvo un discurso político transparente, con principios éticos y de compromiso con la deuda social de la nación.  Y cada día, él se eleva muy por encima de la mediocridad  política y escapa victorioso de los ataques personales.

En estos tiempos modernos los metales más preciados se prueban con los fuegos más fuertes. Hoy, José Raúl Mulino, ha sido probado con el fuego de la injusticia política, de la traición y venció. No es él un improvisado político, sus caminos traen también en el recuerdo las huellas de un expresidente de la República, como Guillermo Endara Galimany, forjador de principios democráticos, un hombre sencillo y humano que cuando estrechaba las manos de sus adversarios políticos lo hacía con dignidad y un abrazo sincero del corazón.

Ya el presidente electo ha llamado a la unidad política,  a la auténtica felicidad de Panamaal gobierno de consenso, para impulsar la nación hacia el desarrollo económico y entre esos caminos él tendrá otra prueba: Acabar con la burocracia, el peor parásito social de Panamá y que siempre es igual al camaleón de gobierno a gobierno.

No porque algunos grupos sean ruidosos se debe pensar que son organizados, tampoco significa que representen una gran parte del pueblo panameño. Algunas rumbas deben llegar a su final. Entre ellas, las fiestas de los famosos asesores; pues  ya  se está convirtiendo en  costumbre del gobierno el  crear posiciones inocuas para satisfacer compromisos políticos sumidos en una especie de rutina.

En los distintos ministerios públicos, más que en la Presidencia de la República, abundan los asesores por todas partes. Los vientos de la democracia nos ha dado el tiempo para pensar, se debe combatir la burocracia estatal, es donde se esconde la peor prenda del Estado panameño;  una elite política perversa y aberrante que se recicla igual al alacrán.

La finanza del Estado no soporta más derroches económicos innecesarios, muchos funcionarios  botellas se esconden con  los trajes de asesores.

El candidato presidencial electo, José Raúl Mulino, es un hombre que llega para fortalecer la democracia y el desarrollo económico de la nación; en los procesos económicos que plantea mantiene una visión de estadista.  Además, por su dignidad política jamás tendrá miedo al seleccionar a los mejores asesores presidenciales y ministros para planificar una variedad de escenarios posibles.

Entre las esferas políticas del país y las tertulias de cafetín se insiste que entre los primeros escenarios se combatirá la migración ilegal, medidas preventivas frente a las pandillas, el narcotráfico; de igual forma, sobre el principio de la normatividad de la Constitución, el principio de la legalidad, el principio de respeto a los derechos fundamentale de las personas o derechos humanos, el principio de la división de los poderes y sin dejar por fuera la concentración del poder que tiende a favorecer la comisión de abusos y la adopción de las decisiones de gobierno desacertadas.

No es tiempo de vivir dando saltos para  caer al vacío.  Raúl Mulino, ha dado el primer paso llamando al consenso político. Hagamos de Panamá el verdadero corazón de la patria, donde tus y yo,  seamos puros al llevar el escudo de la nación en el pecho con los principios esencial para un verdadero Estado constitucional y democrático de Derecho.

 

miércoles, 25 de octubre de 2023

Una mujer excepcional: Marta Linares De Martinelli

 





Por
 Avenabet Mercado

En Panamá los métodos de la justicia tienen resultados de controles muchas veces  mezquino y de injusticia social, reiterada veces no son los más adecuados. De  igual forma el  método político,  en ocasiones es peor;  no es el  más justo  ni  transparente porque muchos dirigentes  no comprenden el sentido preciso de la democracia, un sistema de libertad, justicia y  responsabilidad con la deuda  social.

Aquí todo pareciera que los métodos de la justicia,  al igual la política, son   asuntos de matraqueos. Dicho escenario social no puede  seguir así en nuestra democracia, pues también se cuestiona la  incapacidad del Estado para que los asuntos se hagan bien.

Las organizaciones deberían insistir en fortalecer las escuelas de cuadros políticos, para que de esa manera los dirigentes eleven el nivel de sus discursos, pero pensando en unidad.  Casi siempre los asuntos políticos se inician en Panamá con espanto, sobresalto o venciendo algún  proceso mezquino en interés de violentar cualquier escenario de compromiso con la deuda social de la nación.

No podemos seguir viviendo en nuestra nación  con el “Cheque de la vergüenza”  política. Se debe apoyar siempre la lucha del Tribunal Electoral (TE), cuando se trate de un trabajo eficiente y transparente; debemos cuidar esa noble institución que permanece siempre como un molino de viento con el principio democrático libre en cada una de sus jornadas frente a los partidos políticos.

Al otear la gran batalla en las primarias,  entre las organizaciones partidistas, nada más se sienten los vientos de las intrigas, el personalismo político del yo haré;  poco de los dirigentes blandean el discurso de la responsabilidad con la justicia social que tanto urge en nuestra  nación.

Ahora las voces son de alianza y búsqueda por el compañero de fórmula hacia la vicepresidencia de la República. El país observa en las fichas del tablero político el movimiento de un líder empresarial de éxito, Ricardo Martinelli.

El verdadero  enemigo estaba agazapado adentro y a punto de devorar a una nueva fuerza política como es Realizando Metas (RM), pero surgieron iniciativas ciudadanas valerosa y decidida, movimientos cívicos de excelentes juristas para frenar la injusticia social que se observaba venir.

El camino de un sueño justo hacia el triunfo por Panamá, siempre estará en los verdaderos principios democráticos. El Tribunal Electoral admitió  la postulación de Marta Linares de Martinelli como vicepresidenta del candidato a la presidencia, Ricardo Martinelli, por el partido político Realizando Metas (RM).

La envidia política, un principio de la mediocridad,  una y otra vez trató de violentar un concepto constitucional para colocar piedras en el camino de la ex primera dama de la República, Linares de Martinelli, quien es la esposa del exmandatario y candidato presidencial Ricardo Martinelli por el partido Realizando Metas; pero  el domingo 24 de septiembre, fue ratificada y anunciada su postulación al cargo.

Lo único que falta hora, después de tantas intrigas fabricadas, es que en Panamá nos corrompan también el idioma o piensen pisotear la Carta Magna de la Nación,  como si fuera un pedazo de papel lanzada por el suelo. No se puede hacer tanto daño a  don “Francisco de Quevedo”, la Constitución es la Constitución, nos decía uno de los amigos monjes que inventó en la soledad de San Millán de la Cogolla la grandeza de una obra cultural que nos enseña opciones para moralizar la sociedad o los mecanismos jurídicos que existen frente a la injuria; es necesario ajustarlos, pero sobre todo, ponerlo a funcionar con eficiencia.

«No hay ninguna ley de la Constitución que me impida ir a una papeleta junto con Ricardo para ser candidata a la vicepresidencia de la República», planteó Marta Linares en los predios de la sede en Ancón del Tribunal Electoral (TE) antes de entregar la documentación.  Con la misma lógica, y mayor razón, ejerció su derecho como ciudadana de Panamá.

Marta Linares de Martinelli ha exigido,  claramente, un principio al que tiene derecho por ley. Ella llega en un momento de polarización política, para el electorado da ejemplo de consenso y de criterio moral firme. Su visión, el espejo de la familia panameña; su respeto en la sociedad, es el de un escenario político que se ejerce con honor y transparencia;  hasta en los derechos humanos, nadie puede poner en duda el gran evento moral de su vida pública.

De ella, sus dimensiones y modalidades, como mujer es un modelo de dignidad frente a las vicisitudes del daño; su liderazgo,  es de fuerza y voluntad política; sus principios de derechos humanos, simboliza el  humanismo o el  gran valor moral del derecho de la mujer  en este ambiente político tan confuso, lleno intrigas y maldades.

De por sí, Marta Linares de Martinelli ya simboliza el equilibrio en la democracia de Panamá; frente a un panorama político desolador y provocativo, es una dama de valor, de gran sensibilidad social luchando por la familia y se ha caracterizado siempre por ayudar a la población más vulnerable, que es la infantil y a los que tienen discapacidades. Se ha iniciado la batalla hacia los caminos por el triunfo electoral 2024

jueves, 30 de junio de 2022

Ricardo Martinelli, un político excepcional en Panamá

 


Por Avenabet Mercado / Línea Directa

@AvenabetMercado

Por Avenabet Mercado / Línea Directa

@AvenabetMercado

Hoy el debate político que estamos viviendo, en plena acción de inicio hacia la campaña electoral para el 5 de mayo 2024, exige que cada ciudadano tenga que asumir la decisión del voto popular de acuerdo con su propia conciencia y arraigado también al verdadero juicio cívico dentro del ambiente democrático que espera siempre nuestra nación.

Los ciudadanos poseen derechos independientes de todas las autoridades sociales o políticas, y toda autoridad que viole estos derechos,  se hace ilegitima. Los derechos de los ciudadanos son la libertad individual, la libertad de opinión, el disfrute de la propiedad, la garantía contra todo lo arbitrario. Ninguna autoridad puede atentar a estos derechos, sin desgarrar  su título propio, así es la cuestión.

Pero hay un  derecho que en nuestra democracia se prefiere callar, es el derecho que tienen  los ciudadanos honestos  para exigir el castigo a los delitos púbicos cuando hay supuestos anillos de corrupción en la forma de aplicar la justicia . Ni hablar de los derechos de aquellos empresarios de valores morales, conforme a la razón  y justos  cuando sienten que son engañados por políticos corruptos, frustrados, egoístas, envidiosos, cínicos y más que todos, aberrantes.

De manera pues,  es desde ahí donde empieza a cobrar fuerza,  nuevamente, el discurso del expresidente Ricardo Alberto Martinelli Berrocal; ahora los sociólogos y analistas políticos desde ya tendrán que empezar a estudiar el fenómeno político en la que un empresario trastoca el escenario del torneo electoral, generando ser favorito en las encuestas.

Ricardo Martinelli ha ganado la habilidad de hacerse escuchar, sus consejos económicos son oportunos y la población empieza a tomarlo en cuenta.  Está demostrando en Realizando Metas (RM), que es un hombre sagaz y árbitro conciliador entre fuerzas políticas antagónicas , buscando alianzas en momento de desajuste e incomprensión.

Aunque él es un empresario de éxito, se observa en sus pasos por la arena política que tiene un estilo fijo al populismo en su acción de extender sus manos de ayuda hasta la familia más humilde; nadie pone en duda su oratoria popular, sabe bajar del púlpito altamente satisfecho del saludable efecto que surten sus mensajes. En   Martinelli, al desplazarse por el tinglado político, los ciudadanos muestran una admiración por él.

La Opinión Pública está siguiendo  el ingenio como viene actuando. Él es un verdadero dirigente que ha aprendido a saber esperar el momento oportuno para moverse por los hilos de la democracia panameña, es cauteloso en sus opiniones y sabe cómo cambian las reglas del juego en Panamá, cada día, en las contiendas partidistas y se cuida con esmero de no colocar trincheras insalvables en su camino hacia solio presidencial.

Sus adversarios,  aunque lo acusan para dañar su campaña política, al mismo tiempo lo admiran en silencio. Ricardo Martinelli sabe actuar sin desaprovechar jamás una oportunidad, siempre vive atento a la prensa y se rodea de buenos intelectuales preocupados por la nación. Es un hombre astuto, consulta buena fuente política y empresarial; no tiene complejos, aún al ciudadano común por humilde que sea extiende sus manos de ayuda.

Del  expresidente de la República, Ricardo Martinelli, no hay la menor duda de que su campaña política la viene ejerciendo sin violencia, sin odio a quienes les clavaron dagas en la espalda, pero sí asegurando respeto por su palabra. Es un hombre de promesas políticas que sí cumple, su idea tiene la fuerza del derecho justo por la deuda social del país. ¿Creemos en una democracia liberal y de principios justos, pues entonces,  será  aquí  donde reside el éxito de este hombre excepcional?

El empresario Martinelli recorre un duro camino entre políticos ocultos, de pensamientos mediocres; pero todos sabemos que vivimos aún en un Panamá donde jamás hay resultados concretos que sean justos y quizá, se nota un deseo de revertir escenarios políticos de persecución. Aquí, los métodos políticos no son los más adecuados ni los más transparentes. Peor aún, aunque tenemos un Tribunal Electoral (TE), en muchas organizaciones políticas no se ha entendido el valor real de la democracia.

domingo, 6 de febrero de 2022

Dolor de cabeza genera el costo de la Canasta Básica Familiar





 Por Avenabet Mercado

@avenabetmercado

Viene generándose en el país una inflación rampante que ya nadie aguanta, el Gobierno debe consultar a los mejores expertos económicos para tratar de frenar el escenario;  el camino hacia el endeudamiento de muchas familias es como un infierno.

Sí, estamos viviendo un nivel de precios  en la economía que cada semana aumenta más porque vamos sumando los efectos sociales por el  virus de la pandemia del coronavirus (Covid-19). Todo es igual a un camino empedrado de problemas que,  en la actual situación, pareciera no tener solución.

Frente al escenario habrá que buscar las mejores fórmulas  para así impulsar el desarrollo económico en la nación. Actualmente, se ha iniciado un primer impulso con aquellos indicadores que sirven de ejes para dar vida al desarrollo de la construcción.

Pero además, aplaudamos los pasos dados por el Gobierno Nacional al reactivar la industria del turismo. Ese es nuestro principal recurso,  más inmediato, para bendecir la economía del país y así evitar que algunos componentes más volátiles de la Canasta Básica Familiar, como carnes o servicios energéticos, sigan aumentando de precios sin control.

Estamos viviendo un proceso escandaloso de la elevación de los precios y los ciudadanos no pueden comprar en el comercio como lo hacían ante. La economía, observamos, se está recalentando en Panamá.

Por eso sugerimos al primer Ejecutivo de la Nación, Laurentino Cortico Cohen,  incentivar aún más  la industria de la construcción, potencial la agricultura,  general estímulo en el sector ganadero y para tal fin  consultar a nuestros mejores economistas, contralores, sociólogos, entre otros profesionales, para que busquen fórmulas y así frenar una situación donde la familia ya siente el nudo de la soga en su garganta. ( @AvenabetMercado )



martes, 18 de enero de 2022

Falleció Rafael Rodríguez, el periodista de la crónica

 

Por @AvenabetMercado

Padre de familia, buen amigo, periodista y finalmente, recién graduado de abogado. De su esfuerzo profesional en el mundo de la crónica roja, conocimos bien a Rafael Abdiel Rodríguez Villarreal;  era un hombre sencillo, leal en la amistad y un humanista. Hoy es su última misa en la Iglesia Cristo Redentor, ubicada en el Distrito de San Miguelito.

Siempre recordamos cuando nos reuníamos en esas tertulias del café o para saborear los famosos jugos, que todos los colegas amigo de Rafael conocíamos, los temas de tertulias giraban en el mundo de la política, las noticias policiales y aún más, la familia.


Jamás puedo olvidar al colega Rafael  cuando se refería a los temas  sobre el conjunto de sus  descendientes. Decía que “criar los hijos bien, educarlos como debe ser, es un arte; ser padre es una vocación que nace del corazón y del alma con los mandatos de Dios”.

Así conversaba el periodista de El Siglo y,  luego en La Estrella de Panamá, cuando  insistía que “los hijos al nacer son igual a los ángeles y nos traen cómo un misterio que bien lo sabe Dios”. Muchos amigos recordarán siempre a Rafael Rodríguez por su forma humilde de ser.

Hoy observo una foto del colega Británico, juntos a su querida hija de viaje por Costa Rica, donde visita a la familia; y  ayer, oteando el baúl de los recuerdos en Facebook, Twitter e Instagram, observé las fotos de los colegas Aneldo Arosemena, Eduardo Soto, Edmundo Dante Dolphy , Carlos Singares, Carmen Boyd, Luis Gonzáles, Peña Moran, Lester Burton ( hoy residiendo en Madrid, España) y la periodista de buenos reportajes como Joany De Gracia,  Agustín Jurado, Abdiel Zárate, Rogelio Córdoba para no extender la cinta de tantos periodistas y amigos sinceros que tenía  Rafael Rodríguez en El Siglo, igual en la Provincia de Chiriquí con los periodistas Evelio y Hernán Martínez.

Otear El Siglo




Aquel 26 de enero recordamos cuando el equipo de @elsiglodigital le cantó cumpleaños al entonces director del diario, Ramón Jiménez Vélez (ya  fallecido) ; de allí sale la gran palabra sobre los jugos cuando el colega Avenabet  sale de la oficina, pero luego regresa y dice a Rafael Rodríguez que había llegado otras tandas de los "famosos jugos", pero el profesor Vélez expresó:  "No son nuevos los jugos, sino que cambiaron de color", todos reímos a carcajadas. (Foto Joany-Twitter).

Siempre las vivencias de los periodistas en el diario El Siglo son interesantes.  Si había una gran pelea de boxeo la redacción de  deporte se detenía, era un asunto de buscar la mejor noticia; o el fútbol, todo significaba trabajar con alegría y cada quien en su campo de acción ;  de las noticias políticas y crómicas, podría pasar tantas historias y si   menciono a Rafael Rodríguez no podemos olvidar a Ramón Jiménez Vélez,  un buen periodista y  exdirector de noticias de RPC, El Siglo y de la Escuela de Periodismo de la Universidad Santa María la Antigua (USMA).

El periodista y director Jiménez era eficiente, igual que Lucho Estrivis o Jaime Padilla Veliz. Ellos eran verdadero maestro del periodismo de calle para los reporteros. Jamás exigían cantidad de noticia, pedían al periodista “calidad”.

Recuerdo en el sector de Obarrio como éramos de unidos los periodistas. Lester Burton era el hombre de organizar la tarde de café, persona sencilla, amable y con un fino trato humano para todos sus compañeros.

Por donde quiera que se otee El Siglo, los temas son interesantes. En la tarde de café se integran Lucho Estribí, periodista de excelente pluma en las  columnas diarias, editoriales y finas glosas;  el difunto Jaime Padilla Véliz (quien había fundado El Siglo el 9 de enero de 1985), a pesar de ser el dueño de la empresa tenía un perfil sencillo y de trato bien humano con el personal. “Dejaremos que cada periodista elija su propio material”, así hablaba Padilla, pues tenía mucha confianza en los periodistas del rotativo.

“¿Avenabet  Mercado,  - me decía el viejo Padilla acercándose a mi escritorio-,  por dónde andará la periodista Carmen Boyd?”;  Él  siempre llegaba a la redacción para conversar y saber que noticias políticas traía la colega o los colegas; también, para preguntar a Rafael Rodríguez cuál era la crónica de mañana.

En El Siglo, cada edición de la mañana era como bomba cuando el diario circulaba en las calles; informaciones económicas que hacían temblar a los ministros, por denuncias de funcionarios con las manos peludas o  escándalos de desgreños administrativos. En cualquier punto circulaba el diario, pues siempre traía una noticia eficaz.

Uno no puede olvidar aquellos cierres de edición, otear aquellos instantes donde después el director de El Siglo era el periodista Edmundo Dante Dolphy, un profesional competente, autónomo y con elevado comportamiento de proactividad por su alto grado de motivación intrínseca frente a sus compañeros de trabajos. Es egresado de la Universidad Santa María La Antigua (Usma).

Laboral con el colega y director Dolphy juntos al Rafael Rodríguez, en aquel momento Jefe de Información, significaba estar presente en un buen equipo.  recuerdo cuando los colegas en un descanso de jornadas nos reuníamos para tomar café en la Sala de Redacción del diario.

Aquella época del periodismo era por la buena batalla tras las mejores noticias políticas de portadas en los periódicos, o igual era la competencia por las primicias policiales en cualquiera de los Medios de Comunicación Social (Radio, Tv y prensa).  Aquellos eran buenos tiempos, en la lucha por la noticia objetiva, donde también estaba con muchos entusiasmos el presidente de la empresa, doctor Ebrahim Asvat, con su conocida columna Bitácora del Presidente.

Rafael, un personaje

Esa era una redacción de hermanos, colegas periodistas donde no existía el dardo de  la intriga  en ninguno de sus departamentos; en publicidad, recordamos a la publicista Cristel Caballero; en levantado se recuerda a las señoras Griselda Tejada Lupe, Almita, Benny,  entre otras, que siempre nos traían mensajes de alegría. No importa el departamento ni los momentos, en el diario El Siglo siempre hay unidad.

Para  todos esos escenarios, Rafael Rodríguez  era un personaje en cada cierre de las ediciones diarias al esperar las últimas fotos de Buenaventuras, el captador de imágenes para la crónica del día después porque jamás fue  “un fotógrafo más, sino uno de los maestros del lente”, como también nos dice el colega Leadimiro González C, otra gran pluma de El Siglo, escritor y amante de la crónica roja.

Era bien divertido hacer periodismo con los colegas Lucho Estribí, Jaime Padilla,  Rafael Rodríguez. Como quiera que fuera éramos buenos tituladores para las crónicas policiales o crónica roja, la política, economía y hasta para la farándula. Hoy la fuerza de ese periodismo perdura en todos nosotros.

Ser periodista de El Siglo es como asistir a una buena escuela para las crónicas, noticias políticas o la del mundo de farándula; los periodistas saben preguntar y en una Rueda de Prensa consiguen respuestas interesantes para no dejarse sorprender o tener en cuenta el separar “la paja” de los coloquios que la obtención de la noticia requiera.

Allí los periodistas tenían que sacarse la "la paja", no podían ser lento; allí había que ir en busca de la calidad de la noticia en cuanto a la localización, un choque, una procesión religiosa, un asesinato, un nivel de corrupción política en instituciones del gobierno; para el periodista de El Siglo no hay punto fijo, la noticia se encuentra en cualquier lugar como en los grandes hoteles con sus listas de viajeros, las estaciones policiales, alcaldías y otras dependencias empresariales.

Rafael Rodríguez, un  egresado de la UP

Esa forma de hacer periodismo, ya sea en política, económica o en crónica roja trae sus sellos de la Universidad de Panamá, en una Facultad de Comunicación que no es fruto de la improvisación.

El colega Rafael Rodríguez siempre le pedía a sus hijos estudiar en la Universidad Nacional (UP) y cuando hablaba de sus experiencias en el periodismo decía agradecía al esfuerzo de muchos profesores, o en la mística de muchos intelectuales comprometidos que al estudiar sobre ellos marcaron un estilo profesional  con su vocación y su formación.

Allí, recordaba Rafael Rodríguez,  a profesores como Milcíades Abel Ortiz., David Acosta (fallecido), Jaime García Saucedo (fallecido), Rafael Bolívar Ayala Pallet, Edgardo Murgas, entre otras figuras de la vieja generación que contribuyeron a la formación cultural de los periodistas de la UP como, además del influyente Gil Blas Tejeira, a profesores de la talla de un Luis González, Manuel Barrios, Mélida Rut Sepúlveda, Indalecio Rodríguez Sánchez, Manuel Santamaría Llamas,  Pablo Edmundo Botello, entre otras figuras que aportaron a la formación cultural como intelectuales de la talla de los doctores Cora de Rowe, Susana Richa de Torrijos, Horacio Harris, Alfredo Castillero, Diógenes Arosemena, Ricaurte Soler, Sergio Sandoval, Valentín Medina, Deyanira Barnett, José Jaén, Rita Carrillo, Secundino Torres Gudiño, Rolando Murgas Torraza, entre otros..

El periodismo panameño no es improvisación, tiene su gracia hasta en la crónica roja y no importa el lugar donde este el periodista, si es el colega de ayer o un joven periodista de hoy. La música de los títulos sigue marcando la vivencia del  El Siglo con sus títulos rojos: Gatilleros se desataron en Puerto Escondido, dejaron 5 heridos; Lo encontraron putrefacto en su casa;  La ‘Sombra' recogió a cinco que eran buscados por delitos en Panamá Oeste;  Hombre quedó detenido por crimen de ‘Muñeco' en Herrera, Matan a dos en Colón en menos de 24 horas; Tres quedaron enjaulados por homicidio;  Quedó preso por matar a un hombre el Día de Reyes. Así son los títulos de  El Siglo, ayer y hoy.

Aunque pase el tiempo, siempre tendremos al Diario El Siglo presente, pues el seguirá dando sus batallas mañana y siempre. La presión de los gobiernos no ahoga las batallas del diario por una mejor democracia y un verdadero sentido de la liberta de expresión.

Última misa

El colega Rafael Rodríguez fue un verdadero amigo en los tiempos buenos y  difíciles, jamás subía el tono de sus palabras y siempre  fue él un verdadero maestro para sus hijos,  excelente padre y amigo sincero en las jornadas diarias del periodismo o en el lugar del suceso.

“En el periodismo de crónica policiales, - repetía siempre Rodríguez a los reporteros-, el modo directo de llegar a saber algo que se ignora es preguntárselo a quien lo sabe”.  Mi más sentido pésame para la familia del periodista. Son sus hijos Rafael Rodríguez, Antonio Rodríguez, zugeily Ruiz, julissa Ruiz; Yernos Efraín Gutiérrez, Ángel Azcarate,  Dayana Trejos; sus nietos Liam, Ángel, Diehl, Miguel, Marcos y keitlyn. Mañana sábado, 15 de enero de 2022, nos invitan a su última misa en la Iglesia Cristo Redentor, ubicada en el Distrito de San Miguelito.

Ya no conversaremos con el amigo Rafael Rodríguez; pero sí sé que en la página blanca de nuestra sincera amistad él seguirá hablando con Dios…sin saber que el cielo está tan dentro de él. Paz  para su alma, se nos fue un maestro de la crónica roja. (@AvenabetMercado).

 




Entrada destacada

Presidente Nayib Bukele y los nuevos liderazgos en América

Por Avenabet Mercado Mientras algunos gobiernos de América Latina se sumergen en discursos ideológicos caducos, el presidente Nayib Buk...